jueves, 31 de marzo de 2011

por si algún día regresas ...


Ahora que me acuerdo, te dejé mi compañía plegada en el cajón de las camisetas bonitas. Mi mejor sonrisa está colgada junto a tu esmoquin. Los abrazos rotos creo que están en el cajón de las corbatas. Las miradas de reojo se perdieron en el espejo de la entrada, ese en el que siempre te mirabas para peinarte, antes de guiñarme el ojo y salir por la puerta, ya de buena mañana. Los paseos por Hyde Park los guardé en el zapatero. Las fotografías, están todas colgadas por la habitación. No las quites. Nunca. Son obras de arte, como tú.
Las caras de sueño están junto al amargo café de las 6 p.m. Perdóname porque nunca me acordaba de apagar ni la cafetera, ni la luz de tu presencia en toda aquella oscuridad. Cuánto te echo de menos...
Ojalá algún día recibas el valor que tanto me faltó. Lo escondí entre todas esas cartas sin destinatario que escribía por las noches, cuando me encerraba en la habitación, sola. Tan cerca, y sin embargo tan lejos.
Todas las palabras que debí decirte, todas, están por el suelo del salón, desperdigadas, como las piezas de aquel puzle que intentamos montar, sin resultado. No nos dimos cuenta de que éramos nosotros los que no encajábamos en ese marco de homogeneidad. Ése fue nuestro problema. Somos tan diferentes...
No me olvido de tus consejos, de tus ánimos y de tu optimismo. Están congelados, en la nevera, al lado de la mantequilla de cacahuete, que tampoco tiene fecha de caducidad.
Las noches en vela, leyendo, hablando y jugando al póker. En el jardín, junto al rosal que creció igual que creció aquello que nos unió. Aquello que nos quemaba la piel, que nos ardía en las venas de la conciencia de la misma manera que ardían nuestras penas en la chimenea del comedor, cada vez que estábamos juntos.
Los grises días de lluvia, están todos entre las letras binarias del periódico que comprabas todas las tardes. Las tardes que llenabas de puro colorido, ése que inunda cada cuadro del pasillo.
Las canciones, tu voz, todavía resuenan entre las cuerdas de tu guitarra. Siempre tocabas mientras escribía, para que fuese literatura melódica.
Los besos evaporados deben respirarse por toda la casa. Igual que yo te respiraba cada día, 24 veces por minuto. Minutos, segundos, horas. Cuanto tiempo compartimos. Todavía hoy me entorpece las manecillas del corazón.
Todo me lo dejé allí. En ese mismo ático de la calle Talbot, paralela al famoso barrio de Portobello.
Incluso mi misma persona, mi verdadero yo, después de correr miles de kilómetros, después de huir tan lejos, de querer escapar de mi propio deseo... sigue allí, contigo."
                                                                                 

viernes, 25 de marzo de 2011

Transformación.

Hace mucho que no sabemos nada uno del otro y he tenido el tiempo que necesitaba para pensar en mí. Recuerdas cuando me dijiste que deberíamos vivir juntos y ser infelices para poder ser felices? Considera una prueba de lo mucho que te quiero el haber pasado tanto tiempo desgastándome en el intento para ver si funcionaba; pero una amiga me llevó a un sitio impresionante el otro día.
Se llama el Augusteo. Octavio Augusto lo construyo para que albergaran sus restos. Cuando llegaron los barbaros lo arrasaron junto con todo lo demás. El gran Augusto, el primer gran emperador de  Roma, como podía haber imaginado él que Roma o lo que para él era el mundo entero, acabaría un día en ruinas?
Es uno de los lugares más silenciosos y solitarios de Roma. La ciudad ha ido creciendo a su alrededor durante siglos; es como una bella herida, como un desengaño amoroso al que te aferras por el placer del dolor. Todos queremos que nada cambie, nos conformamos con vivir infelices porque nos da miedo el cambio, que todo quede reducido a ruinas; pero al contemplar ese sitio, el caos que ha soportado, la forma en la que ha sido adaptado, incendiado, saqueado y luego hallado el modo de volverse a levantar. Me vine arriba. A lo mejor mi vida no ha sido tan caótica y es el mundo él que lo es y el único engaño es intentar aferrarse a él a toda costa. Las ruinas son un regalo, las ruinas son el camino a la transformación. Incluso en esta ciudad eterna, el Augusteo me ha enseñado que debemos estar siempre preparados para infinitas oleadas de transformación.

                                                                                                                                                    

domingo, 20 de marzo de 2011

Falles.


             
Duien per lema que anaven a ser molt bones … i la veritat no ens han defraudat. Portàvem un any esperant, un any amb moltes ganes de que arribaren, i unes setmanes planejat coses sobre el casalet. Però com be dic jo, no hi ha res millor que deixar-ho tot a la improvisació i així a sigut.
Tot va començar el dia 15 i fins el 19 no hem parat. Han sigut rises i mes rises; cubates, a munto de cubates; mascletaes (encara que no moltes; es lo que te donar-ho tot per la nit); caminates per Valencia, xiques que dins de no res ens ho convaliden per el camí de Santiago xd; frases, aiii quines frases ... si es que podíem escriure un llibre anomenat “refranero fallero”. Este any hem inaugurat la nostra pròpia falla, amb el seu casal corresponent i el seu lema faller ... la seua pròpia musica etc etc etc
Sens dubtes han sigut grans, molt grans, i ara com be sabeu prepareu-vos que aquest estiu ens espera la nostra penya festera eeh; ja sabeu de que parle i on tenim el lloc xD “SI A LA REINCIDÈNCIA” però açò ja es per a la pròxima. Hui ho deixi ací.

                                                                                                                                               vos estime.

                                                                                                                          

miércoles, 16 de marzo de 2011

Hakuna Matata.


En momentos como estos siempre hay que dejar lo pasado en el pasado .... 

NINGUN PROBLEMA DEBE HACERTE SUFRIRRR!!! :):):):)

                                                                                                                                semana fallera


                                                                                                                                                         

lunes, 14 de marzo de 2011

Las combinaciones imposibles a veces resultan perfectas.

jueves, 10 de marzo de 2011

...

Hoy me apetece escribir … no sé muy bien porque, quizás sea por lo aburrida que estoy aquí en mi habitación cara al ordenador con un montón de cosas por hacer pero sin ganas de hacer ninguna. No es algo que me preocupe, ya que me he propuesto no tocar nada  hasta después de fallas. O quizá simplemente pensar que son las 2 de la mañana y aun no me he ido a dormir sabiendo que mañana tengo clase a las 8:30 y como una hora de camino hasta allí.


Creo que me pondré a leer; mierda no puedo …  aun no he ido a la biblioteca a buscar ese libro que tantas ganas tengo de leer, que me haga salir de la realidad y soñar un poco … soñar con Nueva York, con sus tiendas, sus edificios, su gente, con ellas. Sé que algún día iré por allí, espero que para entonces este todo como hasta ahora. Me gustaría vivir en tantos sitios diferentes que creo que necesitaría otra vida para poder hacer todo lo que mi imaginación tiene previsto.

Cuando me doy cuenta de la realidad, esta puede llegar a desmoralizarme; por eso intento hacer caso de los pequeños consejos de la gente grande y aunque no lo vean se que las cosas han cambiado, que ya no soy como antes,  pero que tengo que renovarme mucho mas; creo que solo me hace falta irme de aquí,  fuera,  lejos de esta ciudad; cambiar de aires; nuevas formas de ver la vida, de arriesgarla,  de jugársela,  de que no importe lo que sucederá mañana porque lo de hoy habrá sido insuperable. Eso si llevando siempre conmigo aquellas personitas tan especiales y que sin duda es lo mejor que puedo guardar en esa caja que llevare siempre conmigo; llena de recuerdos de verano … de fiestas … de viajes … en fin de momentos únicos. Creo que bajare a la cocina a por un vaso de leche con cola-cao bien calentito pero con mucho mucho cola-cao; odio la leche fría y ese sabor que tiene. En casa todos están durmiendo ya .. ellos también tienen su propia rutina mañana, cada uno hacia un sitio, cada uno con gente totalmente distinta, con mil historias y preocupaciones; pero al fin y al cabo nos unen las mismas cosas. Creo que va siendo hora de que apague el ordenador y me meta en la cama;  con un poco de suerte incluso puede que me duerma enseguida. Si creo que voy hacer eso, porque sino mañana tendré que pasar de ir a clase.

Lo de antes no ha sido una despedida, ni un hasta luego, ni nada de ese estilo; pero sabéis que me ahoga la rutina, aunque sé que no se puede vivir sin ella, y que algún día me iré lejos … por mucho o por poco tiempo … a pasarlo mal o bien o incluso muy bien … según lo que me toque, pero no quiero quedarme sin saberlo; para entonces me despediré como toca, aunque también sabéis que las odio y a lo mejor un simple adiós es la mejor opción. Pero eso ya llegara; yo siempre digo que no hay que adelantar ni planear nada, que todo llega … todo pasa; por eso lo único que quiero ahora es vivir con intensidad la semana que viene … porque este finde se inaugura el CASAL FALLER y estas fallas van a dar mucho de sí.
Leo tres o cuatro veces todo lo que he escrito, busco algo que me haya dejado, la batería del portátil se acaba de poner en rojo; el mejor momento para apagar el ordenador e irme a dormir. Mañana será otro día.

                                                                                                                                                 

sábado, 5 de marzo de 2011

Dejate llevar ...

Pero lo eres. Tan vulgar como todos los demás. Comes, bebes, duermes, cagas y meas. Follas si puedes. Cuando te pinchan sangras y si te pica te rascas. Puede que te creas raro, diferente, fuera de lo común. Pero no lo eres. No eres único. No eres original. Hay, ha habido y habrá cientos de personas iguales que tú. Miles. Puede que millones. Todos con los mismos sueños, esperanzas, ambiciones, vicios, defectos. Eres una copia de una copia de una copia. Trágate el orgullo y asúmelo de una vez.
Cabreate. Protesta. Grita. Echa a correr. Puedes huir, pero no esconderte de la verdad. No eres especial ni lo serás nunca. Eres exactamente igual que tus amigos, tus compañeros, tus vecinos. Los que salen por la tele. La gente con la que te cruzas por la calle. Así que cállate y deja de pensar en los demás. En marcar la diferencia y destacar entre la multitud. Porque por muy raro, excéntrico o extravagante que te creas, no has inventado nada nuevo. Y ni falta que hace.
Haz lo que te de la gana. Como te de la gana. Cuando te de la gana. Sabes que no estás solo. Que no eres el único. Pasa de todo y déjate llevar. Ten la cabeza bien alta y sigue tu camino. Simplemente se tu mismo. Porque la vida es demasiado corta para competir con los demás. Y al final todos vamos a llegar al mismo sitio.


          
                                                                                                     dejarse llevar suena demasiado bien ...